miércoles, 1 de mayo de 2013

Cuarto Capitulo : Mecha 3 - 4


Durante todo el proceso no cruzamos palabra. Así como me llevo me trajo y se fue con una evidente preocupación en el rostro. Como a la media hora regresa.
─ bueno, te vengo agradecer tu colaboración en mi venganza. Ya no necesito envenenarte mas, él va hacer sus calculos y cuando se pase la fecha te va a descubrir…lo siento─ se burlaba ella de mi con una mueca de falso pesar─ ¡ah! Si él pregunta por mi decile que no vuelvo, que ya vengué a mi padre..y si pregunta quien fue, acordate de este nombre: Clemente García Meléndez, el estaba desarrollando importantes avances en la detección temprana de células cancerigenas, la ubicación precisa de oncogenes y las mutaciones que derivaban en ellos, era muy respetado en su ámbito. Hasta que el lo encontró y lo extorsionó con revelar su participación en experimentos con prisioneros de la dictadura, experimentos en los que el estaba y aun así lo acosaba y le obligaba a trabajar para él. ¿Y sabes que? se voló los sesos, ¡no aguantó más! Fin de su historia…no te olvides, Clemente García Meléndez. Fue tan fácil ocultarle mi último apellido…ah! casi me olvidaba, en un rato viene una clienta no le hagan esperar es una mina de mucha guita, che… Bueno, nos vemos o tal vez no- terminado su ponzoñoso discurso giró sobre sus pies y se dirigió hacia la puerta.
─ Celeste, ¡estás ahí todavía!?─ la llama el Doctor por el pasillo.
─ ¡Aca estoy!─ grita ella─ ¡maldición!─ murmura entre dientes en una voz apenas audible.
─ Si, acá estas─ la señala con el cd que traía en la mano pero no entra se detiene justo en medio de la abertura de la puerta y apoya un hombro contra el marco.
─ Me parece que hubo un error, este es el encefalocele de la semana pasada, te equivocaste.
Inconscientemente Celeste retrocedió un paso y le respondió toda confusa, enredándose vocales y palabras en un balbuceo nervioso:
─ ao…se, e no se… puede ser. Tengo un desorden ahí, me habré confundido…ao, ahora lo busco y se lo dejo de pasada, si?
El se mueve a un costado y le sede el paso sin perderla de vista. Ella le esquiva la mirada y pasa de espaldas a el casi pegado contra el marco.
─ me estas engañando Celeste─ le susurra al oído rodeándola con sus brazos casi en un abrazo amoroso─ no existe tal cd, no es cierto?─Ella se encoge y agacha la cabeza─ eso pensé─ vuelve a susurrarle, descorre el pelo y posan sus labios sobre el camino de la yugular anterior, la sostiene un segundo y la deja caer en una madeja de dolor a sus pies.
─ Te estaba observando Celeste, pero andabas en tantas cosas que me confundiste, dime una cosa ¿de verdad creíste que regando unos cuantos cuerpos por el río la policía iba hacer algo? No. Pero puede que yo haga lo que tú tendrías que haber hecho con esos cuerpos.─ la toma del saquito de lana y la arrastra unos metros.
─ No, por favor al crematorio, no─ le suplica
─ Pero que curioso, todavía no eres un vampiro y ya le tienes aversión al fuego…como prefieras entonces─ la iza del suelo en un nuevo abraso y la besa en el cuello, ella inhala con todas sus fuerzas y vuelve a besarla, siendo este último beso de una intensidad mortal. La deja allí y viene hacia mí.
─ Oh! Vamos no me mires así…yo la amaba, el amor es igual que los números negativos, si es un paso, (-1) sigue siendo un paso pero hacia el lado opuesto, es así mi cielo, el reflejo oscuro del espejo─ sujeta el tigre por la cruz y lo arroja al suelo.
─ Y tu también me estabas engañando ¿quien lo diría? la inocente Merceditas…
─ Doctor llegó la clienta con la chiquita, esa que llamó por el problemita del hijo─ ella tuerce a mirar a su compañera un momento y continua─ Están esperando en el muelle, quieren hablar con usted ¿las va a ir a recibir? o quiere que les extienda una alfombra roja y las escolte hasta su consultorio.
─ Por lo visto la señora teme no haber invertido bien su capital, yo voy a ocuparme de quitarle hasta la última de sus dudas. Ahora tráeme unos rollos de venda, dos recipientes de suero casi vacíos y un par de vías. ah! Quitales la chapita esa tan molesta que regula el goteo.
Ella frunce el entrecejo a su pedido y sale.
A los pocos minutos el la intercepta en la puerta y le quita algunas cosas de la mano con impaciencia. Rápidamente coloca una vía en mi brazo derecho y la une al recipiente en manos de la enfermera, descendiendo lentamente el suero, va por el otro brazo y hace lo mismo.
─ esto me recuerda un poco a las transfusiones de antaño, no?─ comenta él.
 Nadie le responde.
─ ahora dame eso y sujétale las muñecas estas chicas son muy inquietas y puede moretearse muy feo los brazos─ le dice a la enfermera que duda un instante y obedece.
─ Muchas gracias Monica, adelántate que te sigo en un momento─ ella sale sin perder un segundo.
El baja los recipientes al piso y empieza a caminar hacia la puerta.
─ en un rato vuelvo y tomamos algo juntos, si?─ parpadeó suavemente y salió sonriendo complacido con el tinte rojizo que tomaban ya las vías en funcionamiento inverso.
Bajé un poco mas la mano y trate de deslizar la muñeca por el hueco del nudo pero al hacerlo se ajustó un poco mas, intenté con la otra mano y di con exactamente el mismo resultado. Tire hacia delante y atrás corriendo la venda a lo largo del barral metálico con filo por debajo y se me ocurrió tironear con todas mis fuerzas. Respiré profundo y tiré. Nada. Volví a intentar y solo manche con oxido la venda. Volví al comienzo e intente resbalar la muñeca por la soga arrugada que era la venda e insistí hasta que la piel quedó blanca del esfuerzo, pero tampoco cedió. Iba por mal camino, mejor otra cosa, probé alcanzar a quitarme las vías con la boca pero la cama estaba muy baja, hice fuerza con los pies y  levanté el cuerpo un poco, otra vez, no era suficiente tenía que subir ya inclinada hacia un costado o no lo lograría nunca. No se cuanto hacía que intentaba lo mismo, eso era peor que los abdominales. Estaba muy floja, no sentía fuerza en los brazos, tenía que descansar un momento. Por el rabillo del ojo distinguí el líquido que iba cargando los recipientes. No quiero pensar cuanta sangre estoy perdiendo, el calculo de goteo es con el regulador pero si el…no puede ir muy rápido es solo un tubito delgado, trate de convencerme tontamente.
Alguien venía corriendo por el pasillo.
 La 1er enfermera se acerca hasta mi cama y saca algo del bolsillo.
─ Tomá, esto lo había guardado Celeste para ella, ahora es tuyo, yo soy muy cobarde para usarlo. Perdoname, yo no quise, yo no quería esto…
Huelo humo, ella también lo percibe, toma un impulso y se apresura a soltarme pero no puede. Yo misma los había comprimido en una unidad de tejido algodonoso sin dejar una mínima pista de donde comenzar a tirar para deshacerlos.
Alguien más estaba en el piso de arriba y avanzaba por el pasillo abriendo las puertas de las habitaciones. Las cosas se caen y se oyen gritos por la escalera. El humo ya se ve como una nube que camina por lo alto del techo  bajando en olas difusas. Se resquebrajan los cristales.
─ ya es muy tarde, ellos vienen hacia aquí, no vas a poder escaparte esta vez─ gritaba alguien
─ Cuando ellos lleguen ya no va quedar nada para culparme─ le responde el Doctor con furia.
Un estruendo sacudió el edificio, algún tubo de oxigeno debió explotar abajo.
Ella se sobresalta tira de la cinta derecha y me arranca una vía. Va a quitarme la otra, aparece el Doctor y la arrastra con el hacia fuera.
El olor se volvía insoportable el fuego no tardaría en llegar hasta allí. Vuelvo a intentar soltarme, tiro y tiro en diferentes direcciones y se rompe un poco. Mas fuerza eso es lo que necesito, me dije tomando coraje. Deslizo el codo lo mas atrás que puedo y logro zafar la muñeca sin la vía y me arranco con la mano la otra.
En el pasillo se ve el resplandor del fuego, todo se desplomaba entre crujidos. En mis esfuerzos por soltarme estiro la pierna izquierda y se estira un pliegue de la frazada. Lo que había dejado le enfermera era una jeringa ¿pero que demonios contenía? Otra vez veneno no puede ser ¿para que intentar soltarme entonces?
 Estoy tosiendo mucho se hace difícil respirar…
Vuelvo en si, veo una forma borrosa que se acerca. Un nene con la cara sucia de hollín aparece entre el humo. Hay algo en el que no me trasmite mucha confianza. Quizás sea el humo pero sus ojos son muy oscuros para ser marrones. Ya no se acerca. Se queda estático y me mira mientras tose. Es muy chiquitito. Estiro la mano libre hacia el, trata de alcanzarla y retrocede. Los ojos se me cierran otra vez, voy a desmayarme. La mampostería de la pared salta en pequeñas explosiones y se filtran unas llamas entre el yeso. La salida queda bloqueada por el fuego un momento y cae todo un enorme trozo de muro volviendo la llama más azul. Dentro del falso muro hay unos caños forrados de negro, brea. Eso debe ser gas.
─ ¿vos también te estás muriendo?─ solloza el con su vocecita.
─ No, no vamos a morirnos─ le respondo más asustada yo de el que del fuego.
─ Acá todas las mamas se mueren, siempre nos dejan solos─ dijo  con un temblor mas parecido a la furia que al llanto, apretó los puñitos hincándose las uñas en la palma dejando medialunas blancas bajo los dedos y avanza. Su carita se contrae en espasmos y de a momentos adquiere las marcadas improntas de una mascara de horror y al otro una mirada angelical vuelve a suavizarlos, otra vez la mascarada y otra el ángel.

 Me inclino lo más que puedo hacia el lado opuesto; aprisionada en las tiras de vendaje, friccionando la muñeca dolorosamente dentro de ellas y no cede. Con el pulpejo de mis dedos libres logró alcanzar el final del embolo de la jeringa. El atrapa mi muñeca presa entre sus manitas y cae sobre mí exhibiendo sus diminutos colmillos blancos como la leche. Anticipando el aguijonazo ígneo de la avispa presioné los dientes siseando una inhalación desesperada, dando con el verdadero fragor que incineraba mis venas al unívoco instante que sus trémulos labios se posaban en mi piel. Atizando un dolor que me cerraba los ojos pero quizás, solo quizás me libraría de la asfixia segura que ya sentía escociéndome la garganta y los pulmones.
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Hasta aqui llega este capitulo
¿llega hasta aquí la vida de Mecha?
La proxima semana comienza el ultimo capitulo, se acerca el final!!

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